El género Mesembryanthemum es uno de los que
conforman la familia Aizoaceae y está representado en la provincia por dos
especies, Mesembryanthemum nodiflorum y la que nos ocupa, Mesembryanthemum
crystallinum.
Mesembryanthemum crystallinum |
La primera de ellas es frecuente en los muros de las salinas
sobre terrenos arenoso-arcillosos mientras que M. crystallinum es muy rara,con
pocas citas históricas a nivel provincial y regional.
Ambas especies son plantas anuales o bienales de hojas
carnosas y porte postrado. Sus tallos y hojas están cubiertos de papilas
hialinas que le dan un aspecto brillante, de ahí el nombre de hierba
escarchada, flor de cristal y flor de la plata, tal como recoge Pérez-Lara en
su pars IV de Florula gaditana.
Papilas hialinas en frutos y hojas |
Mesembryanthemum crystallinum es nativa de Sudáfrica, apareciendo
como subespontánea en la región mediterránea, Macaronesia, Australia y
California.
En Andalucia solo existen citas de Almería y Cádiz, y en el
resto de España son también escasas, estando presente en Alicante, Barcelona,
Murcia, Islas Canarias y Palma de Mallorca, así como en Portugal según Flora iberica.
Mesembryanthemum nodiflorum |
Las citas históricas en la provincia se remontan al siglo
XIX en localidades tan dispares como Arcos de la Frontera , en El Castillo,
donde la encuentra Pérez-Lara y posteriormente es corroborada por Silvestre en
1973, en Algeciras, y entre San Fernando y Cádiz, ambas también de Pérez Lara.
Desde joven tengo conocimiento de esta planta que creía
abundante, dado que crecía en los derrubios cercanos a la playa de Santa María
del Mar en Cádiz, adonde nos escapábamos del Instituto Columela para jugar.
Hábito de la planta en su primer año de vida |
Con el paso del tiempo y conforme se acrecentaba mi afición
por la botánica, me fui dando cuenta no ya de lo escaso de la planta en
cuestión, sino de que simplemente no aparecían más poblaciones, hasta que en
2005 encontramos también en Cádiz una pequeña población a la entrada de la
ciudad, en un terreno ruderalizado, junto al mar y lleno de escombros, que es
el ambiente donde al menos en nuestra zona habita.
Sin duda alguna, Mesembryanthemum crystallinum, a
pesar de ser una planta subespontánea en la Península Ibérica ,
debería tener al menos en nuestra región, algún grado de protección, ya que la
consideramos en peligro crítico de extinción.
Hábito de la planta adulta |
De hecho, en Almería está catalogada de rara por Flora Vascular de Andalucía Oriental, y
la población clásica de la playa de Santa María del Mar, que antaño ocupaba una
gran extensión, está en la actualidad representada por unos cuantos ejemplares
que a duras penas compiten, con la batalla casi perdida, con Carpobrotus edulis, Galenia secunda y la inefable cuadrilla de jardineros de nuestro
Ayuntamiento que cuando le dan por “adecentar” los parterres, se llevan todos
los ejemplares que ese año tienen la desgracia de haberse asentado allí.
Hace tiempo me comentaron que también se halla en Chiclana, aunque aún no he tenido la oportunidad de "conocerla".
ResponderEliminarBuen trabajo, como siempre.
Un abrazo.
Hola M.A.
ResponderEliminarGracias por el seguimiento de nuestro blog.
Sería más que interesante el confirmar la cita de Chiclana, de la que no dudo ni un ápice,pues sería seguramente la segunda localidad en la actualidad de la provincia a no se que aparezcan nuevas.
No se si ya estarán pasadas de floración, desconozco la fecha en que florece, de todos modos preguntaré a ver si me pueden orientar y caso de saber algo os lo comunico con sumo gusto.
ResponderEliminarGracias de nuevo.
EliminarLa planta ya no está en floración, pero aun así puede distinguirse bien del M. nodiflorum, por lo que no habría problema de identificación.
Buenos días desde Fuerteventura, interesante tu artículo, esta planta fué un sustento para la isla de Fuerteventura y Lanzarote en el siglo XIX. Ya que de ella aparte de la sosa se hacia una harina tostada muy típica de Canarias que es el Gofio. por la isla crece en todas partes
ResponderEliminarOs dejo el enlace http://top2.fuerteventuraenimagenes.com/la-barrilla-y-el-cosco-plantas-de-fuerteventura/
Un saludo
Hola.
ResponderEliminarAlgo había leído en internete acerca del uso en las islas, tanto para la obtención de sosa como del gofio, cosa que me sorprendió bastante,ya que pensaba que solo se hacía a partir de harina de cereales.
Y gracias por participar en el artículo.
Hace unos tres años la encontré en Sta. María del Mar. Este año me parece que los ejemplares que yo conocía han desaparecido. Estaban en la bajada a la playa. Los jardineros creo que hicieron "su labor".
ResponderEliminarSAludos
Pues sí.
ResponderEliminarEste año solo he visto un par de ejemplares por la zona y nada más.
Esperemos que en años venideros aumente la población, aunque está condenada a desaparecer.
Se me había quedado atrás esta interesante entrada de la Escarchada, pero quería comentarte Javier, que a pesar de que comparto tu admiración por esta bonita planta, las categorías de amenaza deben reservarse para las especies autóctonas. No debe sorprendernos ni apenarnos el que plantas que antaño tuvieron un uso tradicional, como ésta que ya cita en el istmo gaditano Salvador Cerón en 1877, vayan enrareciéndose una vez que dejan de usarse hasta llegar a su extinción local. Es también el caso de otras plantas citadas en Cádiz en el S XIX como Euphorbia lathyris, Linum usitatissimum o Rubia tinctorum, aunque esta última la hemos encontrado de nuevo hace poco. Si nos gustan mucho siempre nos queda la opción de cultivaras en nuestros jardines, pero el hecho de que lleguen a desaparecer siempre es mejor que el que lleguen a convertirse en invasoras, como ocurre con tantas otras, y amenacen la supervivencia de nuestra flora nativa. Un saludo y enhorabuena una vez más por vuestro magnífico blog.
ResponderEliminarGracias por tus interesantísmos comentarios, amigo. Aportas con ellos información de primera y calidad al blog.
ResponderEliminarEstoy totalmente de acuerdo. A veces la admiración supera a la razón y realmente me daría pena que desapareciera esta planta del entorno urbano de Cádiz, ya que por lo que sabemos no sale de este y no parece que vaya a comportarse como invasora. Pero es cierto también que "no se merece" ningún grado de protección y menos aún encasillarla en ninguna categoría de planta amenazada.
Muy a pesar nuestro, hemos contribuído a la eliminación de Ipomoea imperati del litoral, pero esta planta sí que potencialmente es invasora y además crece en un ambiente natural por lo que podría quedar fuera de control.
Y ahora me pregunto.¿No esto parte de la globalización? Cada día estoy más convencido de que es parte de la evolución y que esto es imparable, independientemente de que nos guste o no.