Orchis papilionacea

Más que probablemente la orquídea de flores más vistosas de entre las que habitan la provincia de Cádiz, con su amplio labelo en forma de abanico. Es una especie de distribución principalmente mediterránea, y en España ocupa la mitad sur y Baleares, con algunas localidades aisladas en la mitad norte de la Península Ibérica, tanto sobre calizas como suelos silíceos.

Orchis papilionacea

Está incluida en Flora Vascular de Andalucía Occidental como no muy frecuente en el litoral y en las comarcas de la Sierra Norte y del Condado-Aljarafe, sobre terrenos ácidos, y en Flora Vascular de Andalucía Oriental se la tiene por ocasional en la mayor parte del territorio de que trata esta obra.

Particularmente, y tomando en cuenta nuestra experiencia, tenemos a la especie por muy escasa en Cádiz, ya que hasta ahora solo hemos conseguido observar una población en la provincia: la que conocen todos los aficionados en El Gastor; no hemos conseguido encontrar poblaciones nuevas ni confirmar las de las publicaciones consultadas. Por  cierto, la mayor parte de las poblaciones de que hemos ido teniendo noticia están fuera del litoral, a pesar de lo que se dice en Flora Vascular de Andalucía Occidental, ya que, como hemos dicho, según esta obra solo estaría presente en el litoral de la provincia.

Orchis papilionacea

De hecho, la única cita en el litoral de Cádiz de la que sabemos algo es la del padre Vicente Martínez Gámez, amigo y discípulo de José María Pérez Lara, quien sitúa a la especie en Las Canteras de Puerto Real en su nota El paraíso de las orquídeas ofrídeas en España, publicada en 1921 y dedicado a dicho pinar. Podemos asegurar sin temor a equivocarnos que esta población no existe en la actualidad, ya que hemos recorrido cientos de veces Las Canteras, como aficionados a la botánica y como simples paseantes, y no creemos que se nos hubiera pasado por alto una especie tan llamativa. En el actual estado del pinar resulta difícil de imaginar en él la presencia de esta y alguna otra de las especies citadas por el padre Martínez Gámez, ya que este llegó a enumerar en sus publicaciones más de veinte especies de orquidáceas en Las Canteras, de las cuales no hemos encontrado ni la mitad.

Orchis papilionacea

Del resto de la provincia tenemos noticia de observaciones dispersas. Precisamente Pérez Lara la consigna como frecuente en pastizales de zonas bajas en la primera entrega, de 1886, de su Florula Gaditana. No hay duda que desde entonces la especie ha reducido sus efectivos, ya que son pocas la citas posteriores que hemos encontrado. Sabemos de una de F. Beltrán en 1914 en Casas Viejas, hacia la laguna de La Janda. Mucho más tarde tenemos el hallazgo en 1990 de una población situada entre Medina Sidonia y Alcalá de los Gazules publicado por Martínez Ortega y Sánchez García. Federico Sánchez Tundidor consigna en su artículo publicado el año 2003 en la revista de la Sociedad Gaditana de Historia Natural tres localidades del Campo de Gibraltar, que le fueron referidas por amigos: El Aciscar, Las Zorrillas y San Carlos del Tiradero.

Orchis papilionacea (izquierda) y Orchis x gennarii (derecha)

En el libro aparecido en 2004 Orquídeas de la Serranía de Grazalema sus autores, Luis Velasco y Pepe Beltrán, solo citan el hallazgo de un ejemplar en el interior del Parque, aunque cerca de El Hundidero, en la parte malagueña. También hablan de la población de El Gastor, pero esta se encuentra fuera de los límites del Parque Natural.

Juanjo la tiene fotografiada en los Llanos del Republicano, en Villaluenga del Rosario, y podemos ver la foto, fechado en 2007, en su blog Hablando en Verde  (http://machanguito.blogspot.com.es/2007/05/orchis-papilionacea.html).

Orchis x gennarii

Tenemos otras pocas referencias de amigos y aficionados, generalmente en zonas de campiña, que no hemos podido confirmar, aunque lo hemos intentado. Recordamos que nuestro amigo Fernando Solís relataba que, un poco desesperado de buscar ejemplares de esta especie, un día, en las proximidades de Medina Sidonia, vio que una niña llevaba en la mano un ramillete de espigas florales arrancadas. Probablemente sea la atracción que ejercen sus flores y la recolección que las lleva a morir en un jarrón la causa de que esta especie sea cada vez más difícil de ver en Cádiz; no estaría de más pensar en algún tipo de protección para la misma a nivel provincial.

Orchis morio

La población de El Gastor es una joya que habría que proteger a toda costa, ya que no solo está Orchis papilionacea, sino que de su convivencia con Orchis morio resulta un buen número de ejemplares del híbrido de ambas: Orchis x gennarii. El hecho de encontrarse en una zona de cultivo abandonada y rodeada de un diseminado de edificaciones y parcelas hace que temamos por su supervivencia.